El problema
Aunque tenía grandes ideas, no lograba que nadie las escuchara. En su trabajo sus propuestas pasaban desapercibidas, y eso le generaba una terrible frustración.
¿Quién es Juan Hernández?
Juan Hernández es ingeniero en organización industrial con años de experiencia en el sector técnico. Siempre fue una mente analítica con ideas de valor, pero durante mucho tiempo su voz no tenía el impacto que deseaba.
A pesar de su conocimiento, veía cómo otros con ideas peores captaban la atención de sus superiores.
Además, en casa sentía que no estaba siendo el ejemplo que quería para su hijo.
Su transformación con el Método ICO lo ha convertido en un comunicador sólido, claro y persuasivo, capaz de liderar con el respeto de su entorno profesional y el orgullo de su familia.
Lo que más valoro es la capacidad de adaptar mi mensaje. Ahora transmito mis ideas de manera clara, concisa y persuasiva. Por primera vez me siento influyente. Ha sido un cambio revelador
– Juan Hernández –
¿Por qué eligió ICO?
La frustración de ver cómo sus ideas eran ignoradas lo impulsó a buscar una solución definitiva. No quería seguir viendo cómo otros, con menos preparación, avanzaban más que él solo por comunicar mejor.
Resultados logrados
Sus jefes ahora le piden consejo y escuchan sus propuestas.
Es visto como un líder dentro de su equipo de trabajo.
Su hijo lo admira profundamente y lo toma como ejemplo.
Se siente influyente, seguro y claro al expresarse.
Ha dejado atrás la inseguridad y comunica con presencia.
Las claves del éxito
Articular su mensaje
Dejó atrás la dispersión verbal y ahora expresa sus ideas con estructura, orden, confianza, seguridad y convicción.
Ser referente en casa
Hoy inspira a su hijo con su evolución personal. Su actitud lo ha convertido en un ejemplo a seguir y alguien quien inspira a otros.
Liderar con la voz
Ahora influye de forma efectiva y positiva en su equipo y se hace escuchar, entender y respetar por quienes antes lo ignoraban.
Reescribir su identidad
Se comprometió a cambiar desde la acción y la práctica constante, con constancia y un compromiso con su visión de futuro.
¿Y si el verdadero liderazgo empieza por saber comunicar tu valor?
